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CAMINATA MONTE ORSA-LA SALUT (05-XI-2019)
«El mundo está lleno de pequeñas alegrías: el arte consiste en saber distinguirlas».
Li Tai-Po (701-762) Poeta chino.
«Los espejos se emplean para verse la cara; el arte para verse el alma».
George Bernard Shaw (1856-1950) Escritor irlandés.
Iniciamos la ruta a las 07:00 horas desde nuestro punto de partida situado en Hospitalet de Llobregat, concretamente una calle que lleva el nombre de una montaña de resonancias míticas situada en el Prepirineo catalán: Pedraforca. De aquí ya nos dirigimos hacia nuestro primer objetivo, el Monte Orsa o Sierra de Orsa como era conocido antiguamente antes de su “cristianización”, y hoy oficial y popularmente denominado Sant Pere Mártir, una montaña cuya cima está a unos (casi) 400 metros sobre el nivel del mar. Algunos autores relacionan el nombre antiguo de la montaña con la presencia de osos por la zona, lo cierto que dicha montaña ya era conocida a finales del Siglo X como Puig d’Ossa. Esta montaña está a medio camino entre las comarcas del Barcelonés y del Baix Llobregat, alzándose imponente sobre gran parte de ellas, ya que destaca mucho más por su anchura que por su altura. De hecho toda la Sierra de Collserola es uno de los mayores parques metropolitanos del mundo con 11000 hectáreas, de las que cerca de 8.500 están catalogadas como Parque Natural repartidas entre tres comarcas (las ya comentadas del Barcelonés y del Baix Llobregat, además del Vallés Occidental). La Sierra Oscura como era denominada también antiguamente, es un verdadero lujo para los que vivimos a sus alrededores, aunque si para algunos es lugar de meditación, recogimiento, deporte incluso; para muchos otros sin embargo viene a ser algo así como una especie de desagüe de una bestialidad obtusa, no hay nada más que ver las grandes cantidades de basura arrojada por la chusma en los lugares más cercanos y colindantes a las junglas de asfalto o zonas urbanizadas…
Una vez llegados a Finestrelles, en Esplugues de Llobregat, nos empezamos a adentrar dentro de los límites de la Sierra Oscura. Nos dividimos en dos grupos, uno se encamina directamente hacia la cima del Monte Orsa, sobre ella se encuentran las ruinas de una antigua ermita del Siglo XVII; mientras que el otro grupo se introduce por el interior del bosque que nos encamina directamente hacia el siguiente punto de encuentro, un cerro en cuya cima hay una hornacina esculpida en forma triangular con una representación de la Santa Virgen, construida al parecer en el año 1969 por militares y que curiosamente mira hacia el majestuoso Templo Expiatorio de España del Tibidabo (‘Podium Aquilae’ como denominaban los romanos a dicha montaña). La Divina Madre mirando hacia su Divino Hijo Resurrecto, Triunfante y Victorioso que corona precisamente la cima de dicho Templo y de paso la ciudad de Barcelona. Ante este pequeño y sencillo monumento, sencillez y austeridad propios del laconismo militar del estilo de quienes lo erigieron en plena Era de Franco, las oraciones de rigor y un recuerdo de todos nuestros Caídos.
Ante el decadente arte religioso del Barroco donde predominaban las imágenes y las figuras de un Cristo humillado, vencido, doloroso, sufriente, llorón incluso, algo que tanto entusiasma a la plebe, preferimos la imagen de un Dios en señal de Triunfo y de Victoria, más propio del mundo indoeuropeo que del odioso y oscuro telurismo semita; además el color dorado de la estatua del Cristo que corona el Templo Expiatorio de España está simbolizando la Iluminación y el ‘Sol de Justicia’, tal como denominaban al Cristo durante el Medievo, uno de sus atributos más bien…
Una vez alcanzado el bello mirador del El Turó d’en Corts, una montaña de 390 metros que se encuentra entre los municipios de Sant Just Desvern, en la comarca del Baix Llobregat y de Barcelona, en la comarca del Barcelonés, cogemos un sendero de fuerte desnivel descendente que hay a mano izquierda y que nos lleva directamente hacia la localidad de Sant Feliu de Llobregat, concretamente hacia el objetivo fijado que era La Salut, no sin antes pasar por la llamada ‘Torre del Bisbe’, una masía de grandes dimensiones también conocida como la ‘Torre de Baix’, construida probablemente en el siglo XII sobre una antigua torre de defensa. En el siglo XII perteneció al Obispo de Barcelona Berenguer de Palou, y posteriormente pasó a manos de la familia Vives.
La Salud realmente es una ermita y área de ocio situada en el término municipal recientemente citado. Está dedicada a la Virgen de la Salud, patrona del obispado de Tarrasa. Junto a la ermita se alza una masía, la Casa Gran de la Gleva, que data del 1719 y que hoy acoge un restaurante. Señalar que cada Lunes de Pascua se celebra un aplec (reunión popular) de carácter religioso. El origen de dicha ermita data del Siglo XVIII, pero el culto a dicha Virgen es muy anterior. Vale la pena visitar todo este área y parajes, la citada ermita, la masía hoy transformada en restaurante (algo caro por cierto) y el área lúdica de barbacoas y con bar, donde los precios desde luego son mucho más asequibles para nuestras alborotadas economías, hoy algo tambaleantes en esta odiosa y tiránica plutocracia mundialista y multikultureta. Ah se nos olvidaba!!! Como «curiosidad» señalar que dicha ermita también fue quemada y sus imágenes destruidas durante la Cruzada de 1936-39 por la misma chusma y gentuza de siempre, ello como tantísimos miles de monumentos, esculturas e imágenes sagradas a lo largo y ancho de nuestra Patria. Y cómo no!!! como tantos y tantísimos otros monumentos o edificios, reconstruida durante el Estado del 18 de Julio…
Tras un breve refrigerio, los camaradas saliendo ya de esta puerta de entrada al Parque Natural de Collserola -una de tantas- que es La Salud, sin duda una de las más bellas, para dirigirnos al bonito cementerio del pueblo. Preciosas lápidas, lacónicas esculturas, símbolos religiosos y místicos por doquier, un bonito y sencillo altar en el interior de un templete. Rezamos unas oraciones por los Gloriosos Caídos por Dios y por España ante una lápida hoy tuneada por los farsantes y fantoches «políticamente correctos» (viles canallas en definitiva) de la perversa Desmemoria Histérica. Nuestros Caídos SIEMPRE presentes en nuestro afán como reza el Inmortal himno de amor y de guerra de los «camisas azules», de nuestra Falange Eterna. Como decía Novalis: «Un espíritu histórico no puede tener dudas de que ha llegado el tiempo de la Resurrección y que precisamente los acontecimientos que parecieron haberse dirigido en contra de su activación y amenazaban con consumar su hundimiento, han sido los signos más favorables de su Regeneración». La Hermandad Totalitaria cree en el Despertar, en el Renacimiento, en la Regeneración, en la Resurrección, en la Iluminación, y poner nuestra mente, nuestra visión, y hasta dedicar nuestra existencia terrena mirando y rindiendo incesante culto a la Memoria Sagrada de nuestros gloriosos Antepasados y Ancestros ayudarán sin duda a ello. Como dice el Evangelio, una casa siempre permanecerá firme si se edifica sobre una roca, al contrario si se edifica sobre arena, acabará por derrumbarse, y al fin y al cabo así son construidas todas las demoníacas pseudo-doctrinas de la Modernidad que hoy atenazan al mundo, están edificadas sobre lo frágil, lo voluble, sobre la Mentira en definitiva. Toda verdadera Cosmovisión ha de estar asentada sobre recios y viriles principios espirituales, de lo contrario jamás habrá un verdadero Renacimiento (nada que ver con la farsa humanista y antropocéntrica que se instauró a partir del Siglo XV sobre las ruinas del gibelinismo medieval, y uno de los grandes gérmenes de todos los males habidos y por haber en la actualidad), y una verdadera Regeneración.
Salimos del cementerio y ya nos encaminamos hacia el siguiente objetivo, el bonito Parque de Torreblanca de Sant Feliu, está considerado como uno de los espacios verdes más especiales y mágicos de toda la comarca del Baix Llobregat. La joya de este parque es su magnífico jardín romántico de finales del siglo XIX que otorga un toque de misterio al espacio. El parque está repleto de lagos, islas, cuevas, saltos de agua, grutas… además todo el conjunto está rodeado de una vegetación exuberante que le da un toque muy especial. Un parque que hará las delicias de todas aquellas familias que quieran visitarlo, especialmente de los más pequeños. En el interior de dicho parque hay multitud de senderos, juegos infantiles, zonas con máquinas de entrenamiento para los más mayores y varios espacios con vistas panorámicas donde contemplar el paisaje, además de un espectacular laberinto vegetal. Está considerado el mejor parque urbano de toda la provincia de Barcelona, tiene un total de 12 hectáreas y abarca realmente tres municipios: San Juan Despí, Sant Just Desvern, más el ya citado Sant Feliu de Llobregat. Aunque sobre gustos no hay nada escrito, el Parque del Laberinto de Horta en la capital o mismamente el Parque de Can Boixeres en Hospitalet de Llobregat, tampoco tienen mucho que envidiar del mismo, aunque quizás ambos algo menores en extensión. En fin, cuestión de gustos como hemos dicho. Por otro lado señalar que en el interior del Parque de Torreblanca hay un refugio antiaéreo de la época de la Cruzada, pero que no conseguimos localizar, dejándolo ya para otra ocasión.
Nueva ruta por tanto efectuada por la Hermandad Totalitaria ACIMJI/Barcino y que nuevamente aconsejamos hacer a todos los amantes del Arte, de la Montaña y fundamentalmente de la «otra Barcelona», es decir la que generalmente nos es escamoteada y escondida por los medios de desinformación y/o idiotización del Sistema -y no digamos de la telebasura-, porque ello podría acercarnos o conectarnos peligrosamente con la Barcelona Ancestral, Mítica y Tradicional a la que tanto odian la modernidad progresista y plutocrática, y la basura separatista y antiespañola, todas ellas antimíticas por principio y en esencia. SEMPER FIDELIS!!!
FUERZA HONOR Y TRADICIÓN!!!
Joan Montcau